En las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 13 de agosto la
gobernadora Claudia Ledesma Abdala de Zamora, como precandidata a diputada
nacional, alcanzó el 66% de los sufragios y dejó en segundo lugar al
representante del macrismo, Emilio Rached, con 50 puntos de diferencia.
Ahora,
este domingo 22 de octubre, se viene la madre de las batallas porque los
santiagueños elegiremos tres diputados nacionales, gobernador y vice, diputados
provinciales y comisionados municipales; más intendentes para las ciudades de
Clodomira (de segunda categoría) y Villa Atamisqui (de tercera categoría), en
una compulsa que tiene como favoritos a los candidatos del Frente Cívico por
Santiago.
Con
los resultados de las PASO (que reflejó la opinión pública de la ciudadanía
santiagueña), y con las encuestas que circulan entre los capitostes, el
zamorimo se frota las manos y augura un nuevo triunfo categórico.
En
los círculos de allegados los pronósticos optimistas que se escuchan avisan que
Claudia Ledesma Abdala de Zamora como candidata a diputada nacional y Gerardo
Zamora como candidato a gobernador de la provincia, “alcanzarían el 70 por ciento
de los votos”.
Redoblan
la apuesta ahora que la alianza radical-peronista está terminando el mandato de
cuatro años de Claudia de Zamora, quien supo tender un puente de amistad y
afecto con todos los santiagueños, en especial con los comprovincianos de
lugares alejados. Nadie como ella coronó una gestión de buena administración y
plena en realizaciones con obras vitales como viviendas sociales, escuelas,
hospitales y provisión de agua potable. “Ella tiene asegurado el voto, el
respaldo y el cariño de la mayoría para consagrarse diputada nacional”,
sostienen los operadores zamoristas.
Confianza de Zamora
Por
su parte, Gerardo Zamora transmite una fortaleza anímica de quien sabe del apoyo irrestricto de la inmensa mayoría de la
ciudadanía que lo ubicó en el privilegiado sitial de líder político.
Este
martes, en Canal 7, en el programa Libertad de Opinión que conduce Rogelio
Jorge Llapur, confió en que los santiagueños volverán a elegirlo gobernador “porque
me conocen y son conscientes que juntos vamos a continuar por la senda de realizaciones,
de inclusión social a los que menos tienen, de paz, de desarrollo y de unidad
provincial”.
“Las
obras están a la vista y son importantísimas porque el santiagueño se siente
partícipe del cambio y del progreso de nuestra provincia, así como de un gobierno
que garantiza un Estado con cuentas públicas y prolijas y la estabilidad de
todos los empleados públicos”, sostuvo.
También
Zamora aseguró un futuro “promisorio” de Santiago del Estero con relación al concierto
de las provincias del país y al Gobierno nacional, y reafirmó: “Si es que los santiagueños nos acompañan con
el voto, tendremos dos desafíos importantes que son consolidar y mantener el
equilibrio financiero y la inversión en infraestructura, salud, educación,
cultura y turismo. Todo esto realizado sin endeudarnos -enfatizó-, lo que nos
da la posibilidad de generar más políticas de Estado y generar bases para
desarrollarnos”.
Concluyó:
“Y el otro desafío tiene que ver con una vara muy alta que nos deja la actual
gobernadora que ha sabido poner un contenido social muy fuerte a todo lo que se
ha realizado lo que le ha dado un carácter inclusivo muy fuerte”.