Por Luis Pico Estrada El ex director del Instituto Malbrán, Emilio Santabaya, es una personalidad internacional con más de cien trabajos publicados en la Argentina y en los Estados Unidos, en su carácter de experto en Epidemiología. Como si fuera poco, es un hombre de la cultura y un buen escritor. Su currículum científico es importante. Como lo es su desconfianza ante la voracidad de la industria farmacéutica.
Aquí van algunos de sus pensamientos.
“Las autoridades más importantes del país miraron para el otro lado y pusieron la salud en el sótano. La conducción de una epidemia es completamente diferente a la implementada en la Argentina. Desde un principio debió ser vertical (con directivas unificadas para todos los distritos), mientras aquí fue horizontal, permitiendo opiniones confusas. No puede ser que la Presidenta descalifique al ministro de Salud, Juan Mansur, aun cuando éste no sea especialista de Epidemiología. Me da vergüenza ajena… esto no nos salvará de una epidemia”.
“Especialistas del Malbrán firmaron más de veinte informes en los cuales preanunciaron que la Argentina era proclive a poder tener una epidemia muy superior a lo esperado. Los trabajos son públicos y se hicieron en los años 2003, 2004, 2007 y 2008. Ninguna autoridad nacional le prestó atención. A través de estos informes se supo que todo esto se iba a conocer entre la primera semana de julio y agosto”.
“En el 2004 la Organización Mundial de la Salud envío un informe a la Argentina que advertía sobre una posible epidemia de gripe que podría ser 900 veces mayor respecto del valor de las habituales. Las epidemias se miden con datos estadísticos. Cuando se superan los limites determinados de casos es cuando advierten sobre la epidemia. Pasó un lustro y la Argentina, que sabia entonces que iba a venir una epidemia, no hizo nada”.
“Ahora no hay actividades escolares. Pero el pico máximo se dará la semana del 29 y 30 es decir la primera quincena de agosto.
“Los comentarios del ministro de Salud bonaerense el doctor Claudio Zinn carecen de todo fundamento y son emitidos por una persona que no es infectólogo ni epidemiólogo. Es solo un médico actuando en política”.
“Esta gripe ataca, generalmente, las vías respiratorias. Cuando esto sucede, la mayoría de las personas tienen fiebre, pero depende de cada ser humano cuánta temperatura levante. Es un error informar que, si no es más de 38 grados, no deben realizarse consultas. El Tamiflu no es un medicamento para tomarlo por las dudas”.
“El gobierno porteño dispuso que los cuerpos de aquellos fallecidos por gripe A debían ser velados a cajón cerrado, puestos en bolsas ecológicas dentro de los ataúdes, luego, cremarlos. Los muertos no contagian gripe”.
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