Por la doctora Eugenia del Pilar Pons.
El juez Alarcón está inhabilitado para intervenir en el caso del Consejo General de Educación, porque su hermana es vocal del organismo. |
Paso a informarles que el 12 de junio pasado formulé denuncia en contra del Consejo General de Educación en el juzgado de Crimen de cuarta nominación. La denuncia no tuvo trascendencia y los medios locales se negaron a darle publicidad. La cuestión principal es la investigación por la confección de los títulos apócrifos, ya que el Consejo General de Educación intenta endilgar a mis clientes esa confección, lo que resulta intolerable.
Otra cuestión que se pide investigar se refiere a las licencias que se otorgan. También se menciona otra serie de irregularidades.
Ante la escalada mediática de la presidente del Consejo General de Educación, licenciada Marcela Menini de Barchini (cuya investigación solicité puntualmente en el juzgado del Crimen de cuarta nominación) con su presentación por los cobros dobles, planteé la cuestión de competencia por la existencia de la denuncia relacionada y solicité el apartamiento de Alarcón también porque su hermana María Lía Alarcón es vocal del Tribunal de Disciplina del Consejo General de Educación.
Asimismo y con igual fecha plantee un insta trámite por ante el juzgado del Crimen de cuarta nominación y solicité al juez que instara la declinatoria del juez Alarcón.
De más está decir que no tengo noticias de que se hayan leído los escritos, en especial el del juez Alarcón quien debió notificarme el trámite que le daba a mi presentación. Es más, siguió actuando y yo no fui notificada de nada.
Por datos adjuntos les hago llegar el escrito al juzgado del Crimen de tercera nominación, y una providencia del Tribunal de Disciplina del Consejo General de Educación, donde al pié está inserta la firma de la hermana del juez Alarcón (para que no quepan dudas de que la misma es funcionaria y por lo tanto investigada igual que todos los demás funcionarios y empleados del organismo. Los nombres de los investigados los he tachado por su propio interés.
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