“Sugus”, igualito que Schoklender

“Sugus”, “el Schoklender” de Zamora.

El gobernador Gerardo Zamora sabe todo. Los ministros, los subsecretarios, directores, empleados y todos los organismos de la provincia también tienen información de primera y fehaciente.
El funcionario que más se enriqueció al lado de Zamora es su jefe de Gabinete: Elías “Sugus” Suárez. Zamora sabe todo. Está a su lado desde que ambos se unieron en fechorías en el Concejo Deliberante de la Capital. Fue cuando José Luis Zavalía, por entonces intendente, sacó a patadas a “Sugus” y le pidió a Gerardo que lo “conchabara” en el Concejo Deliberante. Allí unieron sus mentes traviesas y juguetonas con los fondos públicos.
Luego Zamora le hizo el amague a Zavalía de renunciar, pero se quedó. Ocupó la Intendencia dejada por su jefe y arregló con Carlos Juárez, siempre con “Sugus” como ladero y armando la banda de periodistas pagados y agencieros publicitarios que le confeccionaban las facturas apócrifas para vaciar cajas de plata pública.
Zamora vino a la Casa de Gobierno y lo premió con el cargo de jefe de Gabinete. Le dio semejante puesto pese a que conocía que José Zavalía, en el Comité Provincia, lo tenía para cebar mate y barrer la vereda sobre la calle Belgrano.

El “Schoklender”

Lógico, Zamora no lo trajo para que le acercara ideas, proyectos, políticas de Estado, o le escribiera discursos. Menos para coordinar a los ministros y al gabinete. Lo mantuvo a su lado para hacer lo que “Sugus” sabe: enriquecerse con los dineros públicos; los de todos los santiagueños.
¿Qué no hizo y qué no hace “Sugus”? Cobra coimas (retornos, le dicen), organiza con proveedores quién se presenta y quién gana las licitaciones. Se apodera de las partidas de otras áreas y las maneja a su antojo. También reparte lo que le corresponde al de arriba, que no es otro que Zamora, y a los de abajo, que no son otros que ministros, secretarios, directores, proveedores y muchas secretarias privadas convertidas en empresarias que manejan camionetas 4x4. Compra diputados y dirigentes gremiales con dinero que sale de las arcas públicas en concepto de subsidios, y lo reparte como si fueran suyos.
Los familiares y amigos de Zamora son también beneficiados por las “gestiones” del jefe de Gabinete. Hay ministros que se le arrodillan para que un proveedor amigo (o socios) gane o una licitación o cobre una obra sin haberla terminado.
Éste “Sugus” es peor que Schoklender. Con la diferencia que allá en Buenos Aires investigan. Aquí todavía no se mueven las denuncias en su contra. Entonces, hay que tener paciencia. Ya lo dijo el sabio criollo (José Hernández): “No hay tiempo que no se acabe ni tiento que no se corte”. Llegará el día (muy pronto) que “Sugus”, como Sergio Schoklender, deberá aceptar ante la justicia que se robó plata de las arcas públicas y que es dueño de pisos en Córdoba, cuatro edificios de departamentos en el centro de Santiago, de autos, camionetas, de hoteles en la Costa Atlántica, etc.
…Ahora, con estos elementos que aporta a Arena Política, sabrán por qué los funcionarios santiagueños que se dedican las 24 horas del día a la corruptela, siguen en funciones, y en libertad.

“Schoklender”, el “Sugus” de Hebe de Bonafini.

¡Ah, muy pronto, si siguen investigando a Sergio Schoklender, va a tener que defenderse y contar toda la verdad. Una de esas verdades escondidas es cómo operaba en Santiago del Estero junto a “Sugus” Suárez. Puede contar, por ejemplo, cuánto se llevaba de casas no construidas pero certificadas y cuánto de dinero dejaba (retorno o coima) en manos de “Sugus” para se reparta junto a funcionarios santiagueños.