Alegre se quedó sin abogados y le tienen que designar un defensor oficial

Como tantos otros abogados, Nazar y Frola renunciaron a la defensa de Julio Alegre.

Los abogados Hugo Frola y Víctor Daniel Nazar decidieron renunciar como defensores del ex intendente de la Capital, Julio Alegre, por lo que se suspendieron las audiencias del juicio hasta que el tribunal designe a un defensor oficial.
El propio Alegre, el martes, agradeció en pleno juicio el desprendimiento y la dedicación de sus defensores Frola y Nazar, y en la exposición deslizó que la renuncia se debe a “razones económicas”.
Con ello se confirma el anuncio de Arena Política, formulado hace varios meses, en el sentido de que el ex intendente se declara insolvente y asegura que no dispone de un peso ni para pagar a sus defensores ni menos para atender las necesidades de su familia.
Frente a esta situación, los últimos defensores optaron por sus estudios jurídicos privados, después de atender a diario, full time, de 9 a 18, la defensa de Julio Alegre.

Insólita situación

Todavía nadie conoce quién fue el que aconsejó a Alegre que recurriera al estudio jurídico porteño Cúneo Libarona, donde, según se dice, pagó una altísima suma de dinero en dólares, anticipadamente.
Vale la pena explicar que el estudio Cúneo Libarona se encuentra conformado por los cuatro hermanos Cúneo Libarona, Mariano; Rafael; Matías; y Cristian, quienes heredaron la pasión por el Derecho Penal de su padre, Mariano Cúneo Libarona, fiscal de la Cámara del Crimen durante más de 20 años. El estudio se especializa en materia de fraudes y delitos tributarios, habiendo intervenido en algunos de los casos más relevantes de la última década.
Mariano, el más conocido de los hermanos, al ser consultado por Alegre, decidió comisionar a Rafael para que atendiera el caso. De todos modos, en poco tiempo, Rafael Cúneo Libarona fue despedido por el ex intendente y, antes de regresar a Buenos Aires, declaró: “Es un alivio que me echara…”.
Con la ida del porteño, Alegre siguió siendo defendido por los abogados locales Carol Pamela Gadán y Juan José Saín, aunque al final terminaron por abandonar la causa.
Alegre entonces recurrió al conocido penalista tucumano Juan Carlos Nacul, quien deambuló por tribunales durante meses en los difíciles momentos de las indagatorias al ex jefe comunal. Al final, decidió renunciar a la defensa.
Fue cuando ingresaron Nazar y Frola.
En Tribunales se preguntan si ¿realmente Alegre no tiene dinero para pagar a sus abonados, o se quedó sin “resto” por los honorarios que se llevó Cúneo Libarona?
Los más suspicaces responden: “Sabe que será condenado y esconde sus dineros con una paciencia única; sin avisar a nadie ni a su sombra, a dónde está la plata ‘ahorrada’”.
Hay otros que se sorprenden cuando advierten que el resto de imputados (20 en total), entre ex funcionarios, ex amigos proveedores y la escribana "preferida" de Alegre no tienen "dramas" con sus abogados y, al parecer, no esconden sus dinerillos.