Esta noche habrá otra marcha exigiendo justicia en Frías. |
Entre tanto, pasado mañana jueves deberá comparecer ante la jueza que entiende la causa el intendente Néstor Humberto Salim, luego de las declaraciones periodísticas en las que confesó que Jonatan lo llamó a su teléfono celular pocos minutos antes de que lo mataran, y cuando iba a la caza de los narcotraficantes, en las afueras de Frías.
La ciudadanía está expectante y reclama que la justicia indague a Salim para que diga qué es lo que le dijo realmente Jonatan mientras perseguía a los dealers, porque es casi infantil que alguien que va detrás de narcotraficantes hable a “su” intendente amigo y confidente para recordarle que tiene que gestionar que le adjudiquen una vivienda.
Asimismo, es imprescindible que la magistrada interrogue también a Salim sobre quiénes son los que ingresan, distribuyen y venden la droga en su ciudad, tal como declarando en la prensa: “Todo Frías sabe quiénes son los dealers (comerciantes y distribuidores) y cómo se mueven, como amparados por alguien”.
Bueno sería que, como jefe político, de nombres para encaminar la investigación del narcotráfico y del crimen del policía.
Confesión de parte
Encima, para embarrar más la cuestión, la policía de la provincia salió como a contestarle al intendente de Frías y reveló que en los operativos anti-drogas “hay filtraciones”.
Grave aseveración de los representantes de la institución. ¿Filtraciones a dónde? En la propia policía, sin duda, porque se deduce que cuando se dispone un operativo anti-droga en Frías, los diligenciamientos son “secretos” y solamente se enteran los que autorizan los procedimientos: el juez Federal, el jefe de policía y, quizás, el intendente.
Entonces, cuando se habla de “filtraciones” se está acusando que “avisan” a los narcos de los operativos (para que desaparezcan y escondan la “mercadería”), o el juez Federal, o el jefe de Policía, o el intendente, o los propios uniformados.
Molinari y Salim
Ayer, lunes, el juez Federal Guillermo Molinari “indagó” a dos colombianos que visitan Frías como vendedores de canastos y a quienes se les secuestró marihuana. Rápidamente, se cubrieron diciendo que la droga era para “uso personal” y que “jamás se dedicaron a la venta de estupefacientes”.
Ahora, se espera que Molinari convoque al intendente de Frías, Néstor Humberto Salim, para que le de los nombres de los dealers que ingresan y venden la droga en la ciudad, en razón de que con bombos y platillos salió a decir que toda la ciudad sabe quiénes son los narcotraficantes.
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