Cristina Fernández en la inauguración del estadio Ciudad de La Plata. |
En la sección de efemérides de su portal, la agencia estatal publicó un perfil que pretendiendo destacar la trayectoria de la homenajeada, vapuleó a otras figuras públicas. En verdad que las trató de una forma que la Presidenta jamás se hubiera atrevido.
Tras señalar que Cristina se recibió de abogada en 1979, el texto dice: "aclaramos esto porque nunca va a faltar el idiota (textual) que diga que no es abogada, casi tratando de establecer una analogía con el estafador Blumberg".
El párrafo hacía referencia a Carlos Blumberg, el empresario textil cuyo hijo, Axel, fue secuestrado el 17 de marzo del 2004 y luego asesinado. Su padre organizó una multitudinaria protesta contra la administración Kirchner, por su desatención a la seguridad. En todas las entrevistas, Blumberg figuraba como ingeniero siendo que nunca obtuvo ese título. De esa falta se valió el oficialismo para desprestigiar su imagen y más tarde Télam, para realzar la figura de la Presidenta.
En otro párrafo, donde señala que Cristina fue senadora por la provincia de Buenos Aires, se hace hincapié en que le ganó la disputa a Hilda Duhalde (la esposa del ex presidente y rival de los Kirchner, Eduardo Duhalde) de quien se dice que "padece de un complejo de inferioridad" y se le recomienda "un buen psicólogo".
Al actual vicepresidente, Julio Cobos, la agencia lo trata de "traidor" y le achaca una "actitud destituyente" por oponerse a ciertas políticas de la jefa del gobierno. Como para darle un toque de heroísmo a la sucinta biografía, la agencia señala que tras la irrupción de la dictadura militar, "la actividad militante (de Cristina y de Néstor Kirchner) se volvió peligrosa, por lo cual la pareja se trasladó a la localidad de Río Gallegos, en la provincia de Santa Cruz".
Nada peor que mencionar la supuesta militancia del matrimonio, teniendo en cuenta que en esa época les iba bastante bien con su bufete de abogados. Pero ¿cuál fue para Télam uno de los mayores logros de Cristina? Nada menos que su veto a la Ley de Glaciares, una decisión que tomó bajo el imperativo de proteger ciertos intereses económicos y no un acto del que se sienta orgullosa.
Cuando la Presidenta llegó a El Calafate, el retiro patagónico donde se disponía a pasar el fin de semana en compañía de los suyos, la biografía que le obsequió Télam ya había transitado por todos los vericuetos de las redes sociales. Se ignora qué habrá dicho el subsecretario de Medio a los responsables de la agencia, para que éstos la bajaran en el acto del portal.
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