En Santiago del Estero, nadie duda del poder que ejerce el jefe de Gabinete Elías Miguel Suárez y la fuerte influencia que exhibe sobre las decisiones que adopta el gobernador Gerardo Zamora. Los atropellos de este “súper funcionario” con “súper poderes”.
Para muchos, es él quien realmente gobierna.
Verdad o mentira, lo cierto, es que por su despacho desfilan a diario, "maletín en mano", desde encumbrados funcionarios del gobierno, pasando por empresarios de toda estirpe y origen, miembros del Poder Judicial, proveedores del estado, hasta el más humilde ciudadano que reclama su aprobación para acceder a un mísero contrato de locación.
Esto es una verdad inobjetable y lo viven a diario quienes transitan por los pasillos de Casa de Gobierno.
El origen de esta fuerte influencia de Suárez se remonta -informan quienes lo conocen desde siempre-, a la gestión municipal de Gerardo Zamora, donde supo granjearse de una fuerte y sólida amistad. (Agregan: “Amistad y de allí en más, nada”).
Sus amigos afirman que llegó a Santiago del Estero al arribo de la democracia (1983) desde su Córdoba adoptiva, donde supo cursar (agregan: "Sólo cursar") estudios superiores en la Universidad Nacional de Córdoba y, posteriormente, pasó por Santa Fé en la Universidad del Litoral.
Sin embargo, alumnos de aquellos años de las casas de altos estudios no lo recuerdan como estudiante y menos aún como un luchador en las épocas duras. Contrariamente, muchos sospechan que supo rendir exitosos exámenes ante los organismos de Inteligencia de aquellas épocas que operaban en el seno universitario.
Sustentan sus afirmaciones en la ausencia de su nombre en los registros universitarios, pues no rindió jamás materia alguna.
Otro aspecto que analizan sus conocidos es su “llamativo retorno a la provincia que lo vio nacer al mismo momento que el régimen de la denominada reorganización nacional desaparecía del país.
El dato más alarmante lo dieron las Madres del Dolor cuando allá, por el año 2.005, en un acto desarrollado en el paraninfo de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, Hebe de Bonafinni negó estrechar la mano ofrecida por el jefe de Gabinete. Un desplante que para algunos presentes significó de algún modo la clara confirmación de su oscuro como desconocido pasado.
Jamás nadie se preocupó de lo acontecido en la rejuveneciente democracia provincial.
Lo cierto es que las Madres de Plaza de Mayo “nunca más” retornaron a la provincia, ni siquiera con las comitivas presidenciales, a pesar de que a todas partes acompañan a las autoridades de la Nación.
Mostrar las uñas
El devenir del tiempo, y habiendo transcurrido cuatro años en su gestión, comienzan a notarse antiguas prácticas antidemocráticas, propias de los tiempos de la "década nefasta ", todas ellas orientadas y digitadas en persona por el Elías Miguel Suárez.
Al parecer, estaría imbuido en tareas de seguimientos, escuchas telefónicas, digitación de jueces a control remoto, y el manejo de un extraño “Departamento de Inteligencia”, dedicado, por ejemplo, a bloquear diarios web que no se entregan al feudo de Zamora. Para estas tareas tendría contratado a un joven de apellido David y pariente de la modelo y actriz santiagueña Pamela David.
Decimos todo esto porque hay que desenmascarar a los funcionarios que son calladitos y respetuosos en público, pero que desde sus despachos devuelven a cada rato las conductas represivas de otras épocas oscuras, y de todo lo cual nadie habla e informa a la ciudadanía.
Muchos informantes de la Casa de Gobierno aseguran: “Éste es quien ejerce el ‘poder absoluto de control’, al mejor estilo de Videla, Massera o Galtieri. A la oposición se la compra, se la somete o se la combate. No hay mayor alternativa, se es amigo del régimen y del gobierno, o se es enemigo”.
Con los medios de prensa y el periodismo independiente sucede exactamente lo mismo. Hoy, sus socios gráficos, radiales, televisivos, pasquines y revistas incluidos, se someten a la dadiva estatal como único modo de subsistencia. Publican lo que Elías Miguel Suárez aprueba y, por ello, todos ocultan la crítica realidad, reflejando en sus crónicas una sociedad irreal e imaginada sólo por mentes perversas y morbosas.
En contrapartida, todos aquellos medios que se atreven libres e independientemente a reflejar el lado opuesto de una cruda realidad, sufren todo tipo de censura: hasta la proscripción lisa y llana de sus medios.
Y eso en lo que le sucedió a nuestros compañeros de la web : www.arenapolitica.site88. net, quienes vienen sufriendo arteros ataques informáticos a su diario, hasta sacarlo de la red.
Lamentamos profundamente que a esta altura de la vida democrática recuperada en nuestro país a un costo de treinta mil desaparecidos y reestablecido el régimen republicano de gobierno en la era del pos juarismo para nuestra provincia, sigamos los santiagueños sometidos a tan deleznables prácticas dictatoriales propias de los regímenes militares que tanto daño nos ocasionaron.
Y ello, seguramente, acontece ante la existencia de algún alumno y discípulo de aquellos tiempos que aun se mantiene camuflado en el seno del actual gobierno y al cual molestamos. Pero, en el afán de informar la verdad, segiremos adelante.
Ya lo vé, reverendísimo Elías Suárez, seguimos en la red. Tan molestos. Tan irreverentes. Pero con la verdad a flor de pluma. Tiene usted un nuevo desafío. Mandar a destruir las direcciones de email de miles de santiagueños. ¿Podrá?
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