Ni mago, ni magia

Por Deyes Sosa

“Un mago sin magia”, tituló el diario porteño La Nación a una nota del periodista Joaquín Morales Solá, refiriéndose a los sucesos desencadenados pos elecciones del domingo pasado.

¿Cuál sería el cuadro de situación? Solo uno, el que muestra cómo “los gobernadores peronistas se alejan de los Kirchner. Los senadores están más pendientes de Carlos Reutemann que del matrimonio presidencial. Los diputados ojean las agendas y leen las palabras de Francisco de Narváez y de Felipe Solá; más interesados en esas cosas que en las novedades que salen de Olivos”.

Mientras ello sucede en forma vertiginosa, el gobernador Gerardo Zamora reveló a los medios de prensa locales que su Frente Cívico y Social -ganador en las pasadas elecciones, cada vez con menos caudal de votos- apoya al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, como al ex Presidente de manera incondicional.

Desde la Capital Federal, miraban la provincia con ojos de desconcierto e incredulidad, porque no son muchos quienes se atan al carro de los perdedores. El cobismo, que en un principio pensó que la “oveja descarriada” del radicalismo podía ser recuperada para la reconstrucción de la UCR, pegó un fuerte portazo antes de salir de la reunión de emergencia que se había autoconvocado en la sede de la presidencia en el Senado de la Nación.

“No podemos entender la actitud de este dirigente que parece caminar a contramano de la historia”, se repite desde Buenos Aires, por parte de radicales que señalan a Zamora.

“Kirchner es desde el domingo un mago que perdió la magia; todos los conejos que saca de su galera están muertos. Pero insiste: dejó trascender en las últimas horas que estaba pensando en lanzar su candidatura presidencial para 2011. ¿Lo está pensando en serio? No, pero es la forma que encontró para frenar la hemorragia interna del peronismo. Cree, como Carlos Menem en 1997, que su candidatura presidencial operará como un freno para las otras ambiciones. Sólo complicará más las cosas y no resolverá ningún problema", estalló un gobernador que, desde el domingo último, dejó al santacruceño.

Por su parte, se sabe que los gobernadores peronistas en su totalidad conspiraban ayer para convocar al Consejo Nacional del Justicialismo y, eventualmente, al Congreso, para de ahí en más revalidar sus títulos.

“Claro -dijo un viejo militante santiagueño- eso es para los peronistas, pero Zamora aún no está afiliado a nuestras filas. Hoy parece que se quedó sin partido, pero hasta el momento no se define”.