Zamora no hace nada, menos mal que existe Tinelli

La solidaria mujer del 8 de Abril que da de comer a 150 niños pobres del barrio, sin ninguna ayuda del gobierno de Zamora, que ni siquiera la tenía registrada.

Como otros años, la miseria, las necesidades y los desposeídos de Santiago del Estero encuentran esperanzas en el exitoso programa televisivo de Marcelo Tinelli, gracias a que los integrantes de la Fundación Ideas del Sur, propietaria del ciclo Bailando por un sueño, abren los ojos y ponen los oídos para comprender las penurias de tantos marginados y excluidos.
El gobernador Gerardo Zamora incumple, como en otros campos, sus asignaturas elementales. No tiene políticas de Estado y, consecuentemente, desconoce las necesidades de miles de santiagueños que tienen que dejar sus familias para trabajar como esclavos en otras provincias donde se los explota y se los trata como a animales, no sabe de tantas adolescentes de nuestro interior que abandonan sus empobrecidos pueblos para entregar la vida trabajando como empleadas domésticas en las grandes urbes, y no tiene idea del número de muchachos que disparan en busca de mejores futuros y terminan en las villas miserias de Buenos Aires, Rosario, etc., como muchos a los se devoran al alcohol, la droga y la delincuencia,
¡Para qué hablar de la población infantil. Es la más desposeída, porque este gobernador no se inmuta si es que algún funcionario estudioso y preocupado le lleva las estadísticas de los chicos que comen salteado en Santiago del Estero!
Y, gracias a Dios que apareció Tinelli, otra vez, para ayudar al comedor infantil Jesús y los Niños, del barrio 8 de Abril, donde 150 chicos pobres tienen comida diaria gracias a la solidaridad, altruismo y grandeza de una mujer ejemplar como es Mirta Ábalos.
Los funcionarios de Zamora recién cuando vieron el programa televisivo se enteraron de que existía una mujer solidaria y 150 chicos que comen fuera de casa, en un comedor barrial que no tiene techo ni sillas ni mesas ni nada. Comen a la intemperie; pero comen alguito para aliviar el dolor del hambre que padecen sus estómagos.
“Zamorita” dispuso, después de mirar a Tinelli, enviar una cocina y una heladera. ¡Gobernador, eche a los inútiles que lo rodean y que sólo dedican sus horas a rapiñar los dineros de esos chicos pobres! ¡Es imperdonable que no sepan y que no informen a la máxima autoridad que ese comedor barrial funciona desde hace 10 años!

Tinelli y los ladrones

Marcelo Hugo Tinelli ya ha llevado alivio a una escuelita de nuestro interior, a través de Bailando por un sueño. En 48 horas les ha perforado la tierra e hizo posible que el agua potable fluya a borbotones.
Esos santiagueños esperaron 100 años para contar con agua potable. De esa carencia no se informaron ni el “tata” Juárez ni el “tata” Zamora. Y eso que este último anda repitiendo junto a su claque periodística que gobierna “un nuevo Santiago”.
Mientras Zamora y el rapaz jefe de Gabinete, “Sugus” Suárez, extraen miles y millones de pesos para su patrimonio personal, es penoso comprobar que tiene que llegar una mano solidaria de Tinelli para ayudar a los desposeídos de la provincia.
Este “Sugus” se apodera delictivamente de mucho dinero y lo transforma en subsidios para entidades fantasmas de amigos y socios políticos, donde por ejemplo el diputado provincial, capitoste de la CGT, secretario de Upcn y presidente de Quimsa, Gerardo Montenegro, levanta mensualmente entre ocho y diez subsidios mensuales por 150 mil pesos cada uno. Este personaje es dirigente zamorista del barrio 8 de Abril; justamente donde funciona el comedor infantil de Mirta Ábalos.
Una aberrante contradicción. Zamora y “Sugus” se enriquecen junto a sus socios con la plata que debería ser destinada para alimentar, curar y educar a los niños y jóvenes pobres de esta provincia que figura penúltima en el ranking del concierto nacional.
Otro que tiene un subsidio mensual de 150 mil pesos es el diputado provincial Raúl Lorenzo.