Pobreza. En la Legislatura hay muchos diputados molestos por lo que denominan una “pobreza franciscana”. No pueden estacionar sus automóviles en la playa de enfrente a la Legislatura, por falta de pago. No pueden invitar un café a sus visitantes, por falta de pago. No tienen sillas para que se sienten sus interlocutores, porque no hay fondos y no compra nada. Uno de los legisladores del interior, con picardía, preguntó: “¿No estarán por cerrar la Cámara de Diputados?”.
Licencia. El diputado Marcelo Barbur tiene un permiso de tres meses para desempeñarse como subsecretario de Salud. Al parecer, es el tiempo en el que podrá “vigilar” qué hace o qué se propone el ministro del área, designado por el kirchnerismo, desde Buenos Aires.
¿Ascenso? El vocal de la Cámara Oral Federal de Santiago del Estero, Alberto Pravia, ha sido designado en la Cámara de Casación de la Capital Federal para juzgar a los represores en la mega causa denominada “Suárez Mason y otros”. Algunos conocedores del Juzgado Federal local arriesgan: “Tiene para más de un año en este caso, y capaz que Alberto no vuelve más a Santiago”.
Lamentos. El Ministerio de Economía giró a los municipios el 60% de los fondos coparticipables asignados. Les adeuda el 40% y, consecuentemente, los jefes comunales no saben cómo afrontar sus deudas en personal, servicios y obras públicas. Algunos intendentes rumbeadores y que provienen del justicialismo ya están pensando en viajar a Buenos Aires y manejarse en forma independiente con el kirchnerismo, en la búsqueda de apoyos dinerarios.
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