Otra clase magistral del Papa contra los poderosos. |
“Estamos
viviendo un momento de crisis, lo vemos en el ambiente, pero sobre todo en el
hombre. El ser humano está en peligro y el peligro es grave porque la causa del
problema no es superficial, sino profunda, no es sólo una cuestión de economía,
sino de ética y de antropología”, afirmó.
“Hombres
y mujeres son sacrificados a los ídolos del beneficio y del consumo. Es la
cultura del desecho, del descarte. Si se rompe un ordenador es una tragedia,
pero la pobreza, los necesitados, los dramas de tantas personas acaban por
entrar en la normalidad”, denunció.
Su
denuncia fue más allá y con vehemencia agregó: “En el mundo no manda el hombre,
el que manda es el dinero. Sin embargo, Dios dio al hombre la obligación de
custodiar la tierra, no se la dio al dinero”.
Sobre
la creación, el Papa echó manos del libro del Génesis y dijo que Dios puso al
hombre y a la mujer en la tierra para que cultivasen y custodiaran la creación,
pero que el hombre “guiado por la soberbia del dominar, del poseer, del
manipular, del explotar la tierra, no la custodia, no la respeta y no la considera
un dono gratuito que cuidar”.