Por Eduardo
Antonio Abalovich*.
El
distrito Santiago del Estero de la UCR sigue sumido en una grave crisis,
mientras la verdadera dirigencia radical está fuera de todos los manejos y
acuerdos que se han venido realizando en estos últimos años. Quienes conducen
(en representación de un interventor partidario que no está y pareciera que no
existe), lo hacen en un clima de anarquía y, lo más grave, se han olvidado del
pueblo radical.
Ahora,
en nombre de un sector, se aliaron al contador Héctor Eduardo ‘Chabay’ Ruiz
mientras miles de correligionarios se encuentran abandonados a lo largo y a lo
ancho de la provincia. Para colmo, lo pasean públicamente sin advertir que exhibir
a éste sujeto avergüenza a todos los radicales sacrificados y verdaderamente en la intemperie.
Han
terminado olvidando a aquellos que desde hace décadas mantienen una
inquebrantable conducta dentro de la centenaria UCR y pretenden reflotar a alguien
como Ruiz que todavía no ha terminado de aclarar sus vergonzantes cuentas con
la justicia.
Nadie
entiende el enjuague surrealista de aliarse con éste saltimbanqui de la
política, merodeador de los oficialismos de turno y que actualmente no sólo
está en deuda con el radicalismo por sus graves inconductas. Mucho peor, tiene
cuentas pendientes con la justicia por la comisión de delitos infamante como el
de violación.
Preocupación en la Alianza Cambiemos por la situación del macrismo santiagueño que acercó al condenado por violación, Héctor “Chabay” Ruiz. |
No
podemos ignorar que con el devenir de los tiempos y no como fenómeno nuevo,
siempre ha existido la política de alianzas, pero hay que entender que la misma
tiene que estar basada en principios comunes, en actuaciones inobjetables, en
trayectorias que no puedan ser descalificadas, y en todos los casos poniendo a la gente
como la principal destinataria de los esfuerzos de la dirigencia radical.
Por
todo ello, a mis correligionarios les expreso que, con dolor pero con las
convicciones más firmes que nunca, debemos volver a las fuentes de nuestro
histórico partido tratando de exhibir a los hombres que frente a la sociedad no
tienen cuentas pendientes de ninguna naturaleza ni con el partido ni con la
justicia.
* El autor fue diputado
nacional y elegido en tres ocasiones diputado provincial, se desempeñó como
delegado del Pami Santiago y ocupó innumerables cargos partidarios. Siendo muy joven
fue allegado y amigo de Arturo Umberto Illia, y luego mantuvo un trato cercano
con Raúl Ricardo Alfonsín.