Las senadoras nacionales santiagueñas Ana María Corradi y Ada Iturrez de Cappellini, junto a la premiada. |
En el Salón Azul del Senado de la Nación se llevo a cabo
la primera entrega de distinciones “Evita Compañera”, en el marco de un acto
institucional que contó con la presencia de Senadores y distintas autoridades
nacionales, provinciales y municipales.
La distinción “Evita Compañera -Honorable Senado de la
Nación” se instituye este año a partir de un proyecto de resolución aprobado en
octubre de 2012 que establece un reconocimiento anual a las mujeres de cada una
de las provincias argentinas que por sus antecedentes, labor, gestión en obras
de bien o tareas comunitarias, mejor hayan representado el ideario de María Eva
Duarte de Perón como símbolo de abnegación, esfuerzo, solidaridad y
renunciamiento a títulos y honores.
En el caso de Santiago del Estero, las senadoras Ana María
Corradi y Ada Iturrez de Capellini aunaron sus propuestas, otorgándole el
reconocimiento a Martir Zulema Lescano.
Se trata de una mujer nacida en las entrañas de Santiago
del Estero, a quien las circunstancias de la vida hicieron que desde muy joven
y con un hijo en camino se hiciera cargo de una gomería, con la que mantuvo a
su familia.
Así, realizando una tarea de hombres, ocupando su fuerza
física en reparar gomas de camiones pero siempre con sus sueños de estudiar y
progresar intactos ante la adversidad, transcurrió su vida esta abnegada mujer.
Pasó el tiempo y decidió estudiar sorteando prejuicios
respecto a su edad y formación. A la edad de cincuenta años completó la
educación primaria, siguió con el secundario y, no conforme con esos grandes
logros, multiplico sus actividades culturales escribiendo libros y dedicándose
a la artesanía.
Zulema se convierte así en un verdadero ejemplo de vida.
Al respecto, la senadora Ana Corradi refirió:
“Es irrefutable esta distinción, ya que convierte en realidad una premisa de
Evita: “Ha llegado la hora de la mujer que piensa, juzga, rechaza o acepta, y
ha muerto la hora de la mujer que asiste, atada e impotente, a la caprichosa
elaboración política de los destinos de su país, que es, en definitiva, el
destino de su hogar. Me siento orgullosa como mujer y como santiagueña de
Zulema, ella es un referente para todas las mujeres que luchan día a día por un
país mejor, porque entienden que la superación individual forma parte del hacer
Patria”.