Tiempos de juventud en Santa Cruz, con Cristina y Daniel Peralta (actual gobernador de la provincia sureña) y Néstor Kirchner hablándole al “Chino” Zannini. |
Al
final, nadie dudará que Cristina Fernández de Kirchner le puso el vice a Daniel
Osvaldo Scioli. Eligió a su mano derecha y secretario Legal y Técnico, Carlos
Alberto Zannini, el “Chino”.
Lo
apodan el “Chino” por sus posiciones políticas extremas. Candidatos,
gobernadores, intendentes y funcionarios desfilan de forma cotidiana por su
despacho de la Casa Rosada. Es abogado y considerado el kirchnerista más duro
por aliados y rivales.
Nació
en Córdoba, en 1954, pero su carrera política transcurrió lejos de las sierras.
Militó con Néstor Kirchner en Santa Cruz, donde ocupó varios cargos públicos.
Mientras militaba en la unidad básica Los Muchachos Peronistas, de Río
Gallegos, conoció al empresario Rudy Ulloa -por entonces chofer del ex
presidente- y al titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip),
Ricardo Echegaray.
Comenzó
sus inclinaciones políticas en los 70, con el ascenso del médico Héctor José
Cámpora al poder y la tercera presidencia de Juan Domingo Perón. Pero lejos de
pertenecer al “peronismo revolucionario” se volcó a la izquierda dura, formando
parte de la Vanguardia Comunista, agrupación identificada con la ideología
maoísta.
Tras
el golpe de estado de 1976, Zannini fue detenido y mantuvo esta condición por 4
años en una penitenciaría de La Plata. Al ser liberado regresó a Córdoba y se
recibió de abogado en 1981. Con el advenimiento de la democracia en 1983 un
amigo, Roberto Arizmendi, lo invitó a mudarse a Río Gallegos.
Es
el ideólogo de la agrupación La Cámpora, y uno de los apoderados del Partido
Justicialista.
Dueño de decretos y
secretos
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, junto a su secretario Legal y Técnico y compañero de fórmula del precandidato a presidenta, Daniel Osvaldo Scioli. |
Con
la llegada de Kirchner a la presidencia en 2003, Zannini fue designado como
secretario de Legal y Técnica. Desde ese cargo, le dio forma legal a la
estatización de las Afjp, la ley de medios, la puja por las reservas del Banco
Central (BCRA), la reforma electoral y el Fútbol para Todos. También participó
del armado de las listas electorales del oficialismo.
Con
la muerte del ex presidente en 2010, el funcionario se convirtió en el más
estrecho colaborador de Cristina Kirchner. Integra la mesa chica del Gobierno y
es el sostén anímico de la jefa del Estado.
Ante la ausencia de la
Presidenta por el agravamiento de su estado de salud, oficialistas y opositores
no dudan en nombrar a Zannini como el hombre con más poder dentro del Gobierno.
“El presidente actual es Carlos Zanini, que es un hombre que ha hecho una gran
proeza: es el conductor de un gobierno de matriz peronista, cuando él es
frontalmente antiperonista. Al que menos se respeta en el interior del
peronismo es al propio Zannini”, afirmó el escritor Jorge Asís, en diálogo con
Radio Mitre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario