lunes, 28 de enero de 2013

Droga en Frías: el crimen del policía Jonathan Barrera, sin culpables

La causa por el asesinato del policía, en Frías, volvió a fojas cero, y la ciudadanía cree que fue víctima de la mafia compuesta por políticos, policías y narcos.
Cuando el 5 de enero de 2011 apareció asesinado en Frías el joven policía Jonathan Barrera, la Superintendencia del Superior Tribunal de Justicia designó como juez ad hoc para entender en la causa, al abogado Anselmo Ramón Juárez. De entrada, el subrogante ordenó la detención de 11 policías en el convencimiento de que Jonathan, de 23 años, fue baleado en la misma sede de la sub comisaría N°23 del barrio Oeste, en una disputa entre “bandos uniformados” que representan a los tres carteles de la droga que funcionaban y siguen funcionando en la ciudad. El infortunado se dispuso investigar a uno de esos tres carteles de narcos en Frías, sin advertir que iba a meter el dedo en el ventilador. Preocupado, Jonathan habló por teléfono celular a su “padrino político”, el intendente Néstor Humberto Salim, quien andaba de viaje por el Norte del país, aunque nunca se supo la verdad sobre lo que le respondió el político.
Luego, la primera semana de febrero, cuando se hizo cargo de la investigación e instrucción sumarial la jueza en lo Criminal y Correccional de segunda nominación de Frías, Sara María Harón, liberó a los 11 policías, y puso presos a dos muchachos a los que incriminó por el asesinato, todo lo cual fue rechazado por la comunidad de friense, que consideró que se encarceló a “dos perejiles”; bien conocidos en la ciudad como adictos a sustancias prohibidas. Por ello, estas disposiciones de Harón movilizaron a familiares y amigos de la víctima que realizaron marchas contra la justicia, por el centro friense.

Vergüenza judicial

Hace poco, el 29 de noviembre de 2012, la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional -Sala I, revocó el procesamiento de la jueza Harón, dispuso declarar la falta de mérito y ordenó la liberación de los detenidos Raúl Daniel Carlos Becerra y José Omar Sayes.
“Parece que nadie mató a Jonathan”, arriesgó un político adversario del salimnismo, mientras crecen las “corazonadas” de los frienses que el policía fue eliminado por propios uniformados, confirmando la primera versión de que la institución uniformada en la ciudad estaba dividida en tres bandos; cada uno respondiendo a los tres carteles de droga que superviven en Frías.
De este modo, nadie duda que la droga ingresa se distribuye se vende y se traslada a otras provincias, todo, a través de los narcos que actúan en la Ciudad del Oeste, en una rara connivencia con políticos, jueces y policías.
En este contexto, llama la atención también la inacción del juez Federal de Santiago del Estero, Guillermo Molinari, y su fiscal, Pedro Simón, que en la primera etapa de la instrucción lograron copias del expediente “para investigar” lo relacionado a la venta y comercialización de droga en Frías. Hoy, se comprueba que todo fue una alharaca y un exagerado aspaviento, porque el juzgado Federal no hizo nada como para ayudar a esclarecer el crimen de Jonathan ni evitar el tráfico de drogas en Frías.

Todo mal

La población friense sigue disconforme con la actuación de la jueza en la investigación por el asesinato del policía  Jonathan Barrera.
En mayo del año pasado, el Consejo de la Magistratura de la provincia analizó los pedidos de juicio político y destitución de la jueza Harón, por las siguientes causales: mal desempeño, ignorancia del derecho y/o posible comisión de ilícitos penales de acción pública.
Por supuesto, casi todas las denuncias apuntaban a la “mala actuación” de Harón en la causa del asesinato de Jonathan Barrera.
Los miembros del Consejo de la Magistratura, Eduardo José Ramón Llugdar, Pablo Santiago Sirena, Olga Mariela Bitar, María Alejandra Yoshitake, Noemí Claudia Garnica, Luisa Zulema Hallak, Francisco Eduardo Cerro y Carlos Alberto Gozal (por secretaría de Ana Isabel Navarro), resolvieron “desestimar las denuncias”.
Llamó la atención que este Consejo de la Magistratura, en el segundo punto de su resolución, exprese lo siguiente: “Exhortar a la magistrada denunciada, Sara María Harón, a los fines de que no reitere conductas excesivas”.

No hay comentarios: