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| Elogian a Zamora por su “lealtad” con el kirchnerismo. |
Las
loas que escucha Gerardo Zamora forman parte del “Operativo Clamor” que se puso
en marcha desde marzo como lo dijo Arena Política, y que tendrá su apoteosis
cuando la justicia declare la inconstitucionalidad de una cláusula transitoria
de la Constitución provincial y, consecuentemente, libere el camino para el
tercer mandato consecutivo del gobernador.
Sin
embargo, estas alabanzas tienen sabor agridulce para un Zamora meticuloso y
concienzudo que buscaba el efecto sorpresa y que repetía hasta el cansancio:
“No es hora de hablar ni de candidatura ni de re-reelección”.
Ahora,
ese mar tranquilo en el que se movía el gobernador comenzó a hacer olas cuando
la CGT, la semana pasada, y este viernes, el ministro nacional Julio De Vido,
se encargaron de agitar la bandera de la “re re”.
Para
colmo, los dichos del santacruceño
fueron “noticia principal” al instante, a través del portal de internet del
diario porteño La Nación.
Se
rompió el esquema y se aceleraron los tiempos, porque vía diario La Nación el
país comenzó a hablar y a debatir sobre una cuestión que nadie tenía en cuenta:
que Santiago es la única provincia que, además de elegir senadores y diputados
nacionales, irá a elecciones para gobernador y vice, diputados provinciales y
comisionados municipales.
Lógico,
hoy, si lo dijo De Vido, el tema pasó a
ser central en todos los ámbitos de opinión de la Argentina. Ahora, a las
controversias por la supuesta reforma constitucional para la “re re” de
Cristina Fernández de Kirchner, se suma por boca del ministro nacional “el caso Zamora”.
De
este modo, el pretendido tercer mandato consecutivo de Gerardo apurará al
anti-zamorismo de Santiago y al anti-kirchnerismo del país que insistirán con
sus presentaciones de planteos técnico-jurídicos en los que denuncian,
alternativamente, “un avasallamiento a la Constitución Nacional del Gobierno
nacional” y “un agravio” federal del Gobierno provincial.
Único
kirchnerista: único referente
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| De Vido, convertido en jefe de campaña de la “re re” de Zamora. |
Hace
ocho años, Néstor Kirchner, implícitamente, hizo saber a todos los santiagueños
(peronistas, radicales, socialistas, etc.), que su único referente era (y es todavía por estos días) Gerardo Zamora. Lo mismo se cansó de repetir Cristina, mientras que todos los
ministerios nacionales “seleccionan” los mejores proyectos, emprendimientos y
la obra pública para esta provincia conducida por el único sobreviviente de lo
que se llamó la transversalidad o Concertación Plural.
Ese
chorro de recursos (como nunca llegó a Santiago del Estero), transformó el
campo visual del comprovinciano que ahora repite que “mucho se ha hecho”, que
“mucho hemos cambiado”, y que “nadie ha realizado tantas obras”.
Claro
que lo que Néstor llamó “la reparación histórica” que la Nación le debía a
nuestra provincia, levantó obras de
mucha significación para el desarrollo y la promoción humana de los
santiagueños, y otras de tipo faraónicas en las que funcionarios y empresas
constructoras nacionales se aprovecharon obscenamente con sobreprecios y millonarios beneficios que fueron a parar en sus bolsillos, en perjuicio de todos los argentinos.
La
Nación hizo de todo a favor de nuestra provincia. No hay visitante que no deje
de asombrarse por “el cambio”, la pujanza y “cómo se han sembrado obras
públicas”. Zamora, entonces, se elevó a “figura del cambio” y, hoy por hoy,
logra una imagen “buena y muy buena” que superan el 80%, y “una intención de
voto” que anda por arriba del 70%.
¿Beneficio o perjuicio?
El elogio del ministro Julio De Vido, el
viernes, fue superlativo. Pese a haber sido expuesto en términos poco
elegantes, sintetizó una definición política interesante sobre todo cuando
confesó que el kirchnerismo ayer, y el cristinismo hoy, valoraron y
valoran la lealtad incondicional del ex
radical santiagueño al modelo nacional y popular. Y fue más allá: hizo saber
que el gobierno nacional irá con todo para lograr la “re re” de Zamora como así la “re re” de
Cristina Fernández de Kirchner.
“Gerardo
apoya al gobierno nacional de corazón, no de jeta”. Abundó: “Desde que Néstor
creó la Concertación Plural se jugó como amigo y Kirchner no lo defraudó. Del
mismo modo, Néstor le creyó a Gerardo y éste tampoco lo defraudó”.
Luego del paso de De Vido el gobernador quedó como “Gardel”, a
nivel provincial, pero corresponde aclarar que los “problemas políticos” pueden
comenzar a surgir ahora, porque este
“padrino” es de los peor vistos por la ciudadanía argentina y es el infaltable
en las denuncias por corrupción, en las presentaciones de la diputada nacional Elisa
Carrió o en las producciones domingueras del programa Periodismo para Todos que
conduce Jorge Lanata, por Canal 13 de Buenos Aires.
A
nadie escapa que los embates opositores hacia el poderosísimo Ministerio de
Planificación Federal, Inversión pública y Servicios (en especial los provenientes
del Grupo Clarín), podrían salpicar a las obras que De Vido mandó construir en nuestro medio.
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