lunes, 11 de abril de 2011

El domingo con Duhalde, y el lunes con Cristina

Ángel Llamazares.

El argentino los llama “vendidos”, “overos” o “traidores” a los políticos que se pasan a distintos bandos de acuerdo a sus conveniencias personales. En cambio, el Diccionario de la Real Academia Española los define como “tránsfugas”, con estas tres acepciones: 1°, persona que pasa de una ideología o colectividad a otra; 2°, persona que con un cargo público no abandona este al separarse del partido que lo presentó como candidato, y 3°, militar que cambia de bando en tiempo de conflicto.
Por estos días, la política santiagueña va a poner al descubierto este tipo de comportamiento de dos políticos de nuestro medio: Ángel Llamazares y César Eusebio Iturre. Ambos, alineados con el gobernador de la provincia, Gerardo Zamora (de origen radical), y con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, llegaron a sus bancas con esos dos signos. Son legisladores que se ubican en espacios bien definidos. Son, al mismo tiempo, zamoristas y kirchneristas.
Las actuales circunstancias políticas han hecho que ambos representen, en pocas horas, sus condiciones de auténticos “tránsfugas”.

Travestismo

César Eusebio Iturre.
Veamos. Hoy, en la sesión de la Legislatura, van a vestir el traje de zamoristas-kircheristas. Luego, al final de la reunión, iniciarán el proselitismo por el Peronismo Federal con motivo de la primaria entre Eduardo Duhalde y Alberto Rodríguez Saá. Consecuentemente, el domingo 17 votarán y harán votar por Duhalde y, al final de la jornada, con seguridad festejarán el triunfo del bonaerense sobre el puntano.
Pero el lunes 18, junto a Zamora y el resto de diputados oficialistas, recibirán a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y participarán de todos los actos oficiales y políticos de la primera mandataria en nuestra ciudad.
Es difícil que el gobernador Zamora los inste a definirse; a ponerse una sola camiseta partidaria. Tampoco la Presidenta se va a enterar de estas volteretas provinciales.
Ahora, los que son capaces de exigirles que opten por seguir como oficialistas o convertirse en opositores son Duhalde, Gerónimo “Momo” Venegas y Julio César “Chiche” Aráoz.
El más complicado aparece Llamazares, porque manteniéndose como zamorista-kirchnerista está ocupando los salones de su gremio y de su obra social (en Sáenz Peña y Moreno), en reuniones y reparto de votos del duhaldismo. Incluso, el miércoles 13, tiene que recibir a su jefe gremial, el “Momo”, quien viene a bajar línea a él y a todos los dirigentes y asociados de Uatre y de Osprera.
La pregunta es obvia: ¿se animarán a renunciar a la bancada de diputados zamoristas y formar bloques unipersonales?
Sería un modo elegante de disfrazar sus condiciones de “tránsfugas” de la política pueblerina.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mil felicitaciones por el articulo. Y esten seguros que los de Buenos Aires estamos enterados de todo lo que alli sucede.

Eduardo dijo...

Me pregunto si éstos atorrantes y sinverguenzas como LLamazares e Iturre son los culpables de tanta desfachatez o si somos nosotros los santiagueños, los que le damos de comer, los culpables de tener esta verdadera lacra humana en la politica.

Anónimo dijo...

Querido eduardo, siempre dije y lo sostengo, no es la culpa del chancho, sino del que le da de comer. Es hora de hacernos cargo de nuestra responsabilidad.