Los “chicos malos” que cobija Zamora en La Banda

El gobernador Zamora sigue poniendo plata, obras y favores a sus “referentes” que le prometen (le mienten, por supuesto) ganarle a “Chabay” Ruiz en La Banda.

Llamamos “chicos malos” de Gerardo Zamora en La Banda a los pícaros que le hacen creer al gobernador que “trabajan cada vez más fuerte y sin pausa” al otro lado del río con el objetivo de derrotar al intendente contador Héctor Eduardo “Chabay” Ruiz. Y, como todo el mundo sabe, hablarle a Zamora de “lijar” a “Chabay” es darle alegría y entonarle la musiquita que quiere escuchar.
Los “chicos malos” de La Banda le mienten las veces que pueden al gobernador haciéndole creer que ya lo tienen “en la mira” y que “lo van a voltear” (con votos, se supone) al jefe político bandeño. Claro que a Zamora le agrada este tipo de mentiritas y él las viene sufriendo de hace tiempo, porque les otorga de todo a los pícaros antes de las elecciones, pero al final siempre pierden con “Chabay”; porque cuando más son los rivales más amplios son los triunfos del intendente. Y Zamora paga 250 mil pesos a cada uno de los referentes “anti chabaístas” que se venden mintiéndole una y otra vez que van a desbancar al “enemigo número”.
Como haciéndoles burla a los zamoristas de la primera hora y a los nuevos que Zamora tiene que comprar, Ruiz organiza sus festivales, como el de la Salamanca, y reúne 25 o 30 mil personas por noche.

El caso de uno de esos “pícaros”

Uno de esos “anti-chabaísta” es el ex diputado provincial Pedro Rojas, “referente” y un crack para hacerle creer al gobernador que “esta vez le ganamos a Ruiz”.
Fijémonos.
Hace más de un año, el tal Rojas le vendió un buzón al “jefe" diciéndole que lo designe responsable de lo que será en el futuro el Centro Cultural Banda. Para ello, se apoderó del local de República de Líbano, entre Garay y Lavalle, donde funcionaba otrora el Club de Cazadores y Pescadores.
Allí, con la supervisión de Rojas se realizan las obras para construir el Centro Cultural Banda (un salón y una planta alta), pero resulta que el proyecto no arranca, pese a que hasta ahora Zamora le va otorgando más de 2.500.000 de pesos. Encima, el contratista, es el yerno de Rojas.
Todo porque aquí se tira la plata a los amigos y correligionarios, sin control y con total impunidad.