Por Deyes Sosa
Hugo Moyano, secretario general de la CGT nacional, les hizo "el osoooo" a los sindicalistas santiagueños que desde horas tempranas comenzaron con la "arriada" de carenciados hacia el local histórico de la calle Roca casi Libertad. Una vez más la carencia de pueblo en los actos en donde participan quienes dicen representar a la clase trabajadora se hizo sentir tanto que docenas de colectivos contratados se encontraban estacionados en las inmediaciones del parque Aguirre, desde donde descendían mujeres y niños ataviados y con pancartas alusivas al acto que presuntamente debía ser observado por el mandamás del gremio a nivel nacional.
José Gómez, de Luz y Fuerza, asumió la conducción gremial y, como Adjunto, Gerardo Montenegro, de Upcn, sin votación alguna de parte de los trabajadores, tras un acuerdo de cúpula.
La dirigencia gremial dispuso crear numerosas secretarías nuevas como la de Empleo, Capacitación, Medio Ambiente, Producción, Seguridad Social, Ciencia y Tecnología, entre otras, a donde fue ubicando a distintos dirigentes a fin de lograr la ansiada unidad.
En el acto de anoche estuvieron presentes además intendentes, diputados y comisionados.
Como no podía ser de otra manera, se leyó una carta de salutación a las nuevas autoridades, enviada por el gobernador Gerardo Zamora.
Una vez más quienes dicen representar los intereses de la clase trabajadora, que trabajan de intendentes, diputados, concejales, etc., pusieron la nota al terminar el encuentro. En efecto, la cúpula se reunió en una cena con el cubierto que costaba 150 pesos, a la que no asistió ningún obrero, atento al valor de la entrada.
Al fin, el ambicioso y voluminoso líder sindical con pretensiones presidenciales no concurrió a la cita propuesta por los jerarcas y millonarios dirigentes sindicales, que aún no conocen el voto popular de quienes dicen representar. ¡Bhaaaa…!
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