En Tribunales, los empleados pagan los platos

Resulta que el gobernador Gerardo Zamora está muy molesto con el ministro de Justicia, Ricardo Daives y con el presidente del Superior Tribunal de Justicia, Lionel Suárez. Aunque no se sabe cuáles son las causas, sin duda se deben referir al mal funcionamiento del servicio de justicia y no a cuestiones personales. Algo no anda bien y hay quienes arriesgan en anticipar que el gobernador estaría pensando en “reemplazos” en los altos cargos.

El fastidio del primer mandatario ya ha llegado a Daives y a Suárez y a todo el alto cuerpo judicial de la provincia. En el “cuarto piso” todo es nerviosismo, y ese estado de estrés se traslada a los empleados.
Claro, Daives y los del Superior Tribunal de Justicia se la agarran con los empleados a través de “grupos de tareas” que caminan los pasillos, ingresan a las oficinas y controlan uno a uno a los trabajadores.
“Hasta para ir al baño tenemos que andar con la autorización o el permiso de nuestros superiores en la mano, porque si no estás te suspenden sin miramientos”, se quejó una señora con mucha antigüedad en Tribunales.