José es el único que denuncia, aunque no le publiquen nada

Zavalía, único diputado que denuncia la corruptela.

Por imperio de Gerardo Zamora, los medios tradicionales de prensa no deben publicar nada de lo que ocurra en las sesiones de la Legislatura. Están obligados a enviar cronistas, fotógrafos, camarógrafos, etc., pero nada se traslada a la gente. (El ciudadano no se ha enterado ni quiénes son sus diputados, y hay orden del mandamás de hacerlos desaparecer de la vidriera, mientras él ocupa ocho o nueve páginas diarias junto al impresentable socio, el intendente Hugo “Lito” Infante).
Todo porque el radical José Luis Zavalía desnuda cotidianamente la corruptela, el engaño y la ineptitud del establishment santiagueño.
El martes pasado, por ejemplo, José hizo pública la entrega de subsidios por decenas de miles de pesos a un diputado del Frente Cívico, como es Raúl Francisco Lorenzo. Este parlamentario que milita en “la izquierda” utiliza a los “derechos humanos” en beneficio personal, y dice que tiene una desconocida fundación por la que recibe otros beneficios.
Zavalía acreditó sus dichos con documentación obtenida en fuentes del Ministerio de Economía, donde consta que cobra a “título personal” y todos los meses, un “subsidio” de 14 mil pesos.

Iniciativas de la UCR

Además, Zavalía presentó varios proyectos relacionados con asuntos de repercusión social como las inundaciones, el cuidado del erario público o la posible corruptela en ámbitos gubernamentales.
Igualmente, formuló pedidos de informes acerca de la sospecha de manejos ilícitos en que podría haber incurrido el jefe de Gabinete, Elías “Sugus” Suárez, de los subsidios ilegales para integrantes del Frente Cívico, la construcción de un mega-aeropuerto en Las Termas de Río Hondo, la mala construcción del camino La Aurora-Nueva Esperanza y la pésima perfomance del dique Figueroa.
Por otra parte, solicitó informes sobre un nuevo avión de lujo adquirido a 8.500.000 dólares, obviamente, con fondos públicos.
En otro pasaje de la sesión del martes, José Luis Zavalía dejó al descubierto la complicidad de la empresa Panedile con el gobierno provincial que dirige Gerardo Zamora en innumerables obras públicas y de abultados montos, donde esta firma resulta la gran beneficiaria en las adjudicaciones, casi todas en forma directa, sin licitación y violando la ley de Contabilidad de la provincia.
Dejó constancia que “todo el mundo sabe que la tal empresa Panadile pertenecería a la familia del ministro de Infraestructura de la Nación, Julio De Vido”.