Torrado Mosconi y Francisco Polti, formularon reflexiones tras el asesinato de Cristian Ferreyra, del Mocase, por defender su tierra. |
Al acercarse el Adviento, tiempo de preparación para el Nacimiento de Jesucristo, Señor de la vida y de la historia, y ante los acontecimientos dolorosos por los hechos de violencia de público conocimiento, los obispos junto a nuestros sacerdotes, queremos hacer llegar al Pueblo de Dios que peregrina en Santiago del Estero nuestras palabras de pastores, inspiradas en el mensaje siempre actual de Nuestro Señor Jesucristo.
Con una mirada de fe nos acercamos a la realidad dolorosa que algunos hermanos nuestros atraviesan en esta querida provincia de Santiago del Estero, causado por problemas de una distribución poco justa de la tierra y la preservación del medio ambiente. Hay bastantes cuestiones pero se destacan el problema del derecho a la tierra que no siempre es debidamente reglamentado, o si lo está no siempre es bien defendido; la concentración de la propiedad rural por unos pocos; y el uso indiscriminado de los recursos naturales, en especial las minas, los bosques y las reservas acuíferas.
En el ejercicio de nuestro ministerio hemos podido escuchar de los campesinos, en reiteradas ocasiones -no sólo en el ámbito de la Mesa provincial de tierras sino también en las diversas visitas pastorales- relatos donde expresaban las diversas problemáticas que han derivado en estas situaciones de violencia, especialmente los desalojos muchas veces violentos de comunidades, que de un día para otro, se ven despojadas de sus tierras y son consideradas por las autoridades como intrusas en su propia tierra.
Reconvención a gobernantes
Animamos a todo el Pueblo de Dios caminante en Santiago del Estero, especialmente a los hombres y mujeres que tienen responsabilidades por haber sido elegidas para algún servicio a la comunidad, a garantizar y promover el bien común, que es trabajar por una provincia que incluya a todos.
Nuestra palabra de pastores quiere centrarse en dos principios de justicia, sin los cuales no habrá paz verdadera, la que rogamos a Dios nos regale en este Adviento – Navidad, y en la que empeñamos nuestro servicio evangelizador dirigido a todos, pero estando especialmente al lado de los que tienen la vida y la fe amenazadas.
El destino universal de los bienes: Dios ha destinado la tierra y todo cuanto ella contiene para uso de todos los hombres y pueblos, de modo que los bienes creados deben llegar a todos en forma equitativa, bajo la guía de la justicia y el acompañamiento de la caridad. Constituye un derecho natural, primario y universal.
El derecho de propiedad privada con función social: La propiedad privada es un instrumento de actuación del principio del destino común de los bienes. Por lo tanto el hombre, al servirse de esos bienes, debe considerar las cosas externas que posee legítimamente, no sólo como suyas, sino también como comunes, en el sentido de que han de aprovechar no sólo a él, sino también a los demás.
En el deseo de sumar nuestra concepción cristiana al tratamiento superador de la problemática planteada, nuestra principal propuesta -además de llamar al urgente cese de toda forma de violencia- es aceptar el camino de conversión a Dios, puesto que ello nos permitirá avanzar, agilizar y sostener la medidas que restituyan la equidad y la justicia de una mejor distribución de la tierra y en el uso de los recursos naturales.
El Señor de Mailín los bendiga a todos y la Virgen nos proteja con su manto.
Ariel Torrado Mosconi Francisco Polti
Obispo auxiliar Obispo de Santiago del Estero
1 comentario:
AAAHHH bueno, Santiago parece que SI tenia Obispos. Se acordaron de los "conderos más resagados" en el rebaño del Señor. Esperemos a ver que HACEN ?
Publicar un comentario