domingo, 29 de mayo de 2011

El “nuevo Santiago”: esclavizan a peones y tienen grupos para-policiales

Por Télam, Agencia de Santiago del Estero.
Denuncian que en Santiago del Estero hay guardias armados que sirven a terratenientes e impiden una inspección por trabajo esclavo.
El delegado del Ministerio de Trabajo en Santiago del Estero, Alejandro Ducca, presentó una denuncia penal ante la justicia federal por explotación a centenares de peones rurales estacionales y aseguró que guardias armados impidieron que el lugar fuera inspeccionado por la cartera laboral y por la Afip.
El lugar denunciado es la explotación agraria en el campo "Las Corzuelas", de unas 9.000 hectáreas, cerca de Tintina, unos 200 kilómetros al noreste de la capital de Santiago del Estero.
Ducca informó además en el detallado escrito -al que tuvo acceso Télam- que junto con el responsable de la Afip en la provincia norteña, Ricardo Dib y la jefa regional de ese organismo, Sara Leguizamón, más inspectores de la cartera laboral, se presentaron en el campo pero guardias armados a bordo de una camioneta les cerraron el paso y debieron retirarse.

Esclavitud

El funcionario fue informado de la situación por dos peones que se escaparon del campo, Elías Barrazán y Juan Manuel Larrea, quienes contaron al funcionario que entre 500 y 600 trabajadores, muchos de ellos con sus familias (mujer e hijos chicos), estaban en el campo desde abril, adonde habían llegado desde distintos puntos de Santiago del Estero.
"Dormían y comían en el suelo, sin la mínima protección contra el clima o animales. Los alimentos eran vendidos por los empleadores a precios exorbitantes, una bolsa de harina que cuesta 25 pesos se las cobraban 100 pesos; dos kilos de carne cada cuatro días y como no tenían ninguna forma de conservación, se pudría", detalla el escrito ante el juez federal.
A los peones, contratados para desmontar el campo y luego proceder a la siembra de soja, y en menor medida maíz y sorgo, les vendían las herramientas de trabajo -palas, hachas y machetes- a mucho mayor precio de lo que corresponde, según denunciaron.

Sin agua

Ducca presentó pruebas documentales y fotos que acompañan la denuncia: "los peones se encuentran en estado de abandono, hacinados en carpas construidas de manera improvisada, calzadas en troncos y con techos de plásticos o lonas, precarias", precisó.
"El abastecimiento de agua es esporádico y no es apta para consumo humano. Los obreros duermen en colchones en pésimo estado, en el suelo, expuestos a picaduras de animales venenosos rodeados por monte y malezas. Se autoabastecen de alimentos y los cocinan a fuego de leña, y están en permanente contacto con bidones de plaguicida a los que usan para sentarse", añade.
También denunció que "no se respeta la normativa que garantiza condiciones mínimas de seguridad e higiene", ya que carecen de baños, duchas o letrinas, y el desmonte -principal motivo para contratarlos- lo hacen "a pie descalzo o alpargatas, y sin guantes".
La intención de los inspectores era examinar la situación de los peones rurales en "Las Corzuelas", según la denuncia que habían recibido, pero tras recorrer 18 kilómetros desde la ruta provincial 5 una tranquera los obligó a caminar 12 kilómetros, hasta que se toparon con las llamadas "guardias blancas", quienes con escopetas en la mano, los intimaron a retirarse.
Las "guardias blancas", según diversas denuncias que conforman distintas causas judiciales, están integradas por personas armadas y que se desplazan en modernas camionetas, y son contratadas por los empresarios de vastas zonas de Santiago del Estero.
Ante esa situación, los funcionarios presentaron la denuncia penal ante el Juzgado federal, y pidieron la intervención de la Oficina de Rescate y Acompañamiento a las personas damnificadas por el delito de trata, entre otras medidas para esclarecer la situación de explotación a la que eran sometidos centenares de trabajadores.

No hay comentarios: