Por Luis Pico Estrada, desde la Capital Federal
Ell sísmico Jorge Giacobbe no sólo es un encuestador de buen ojo. También se abstiene de ser proveedor abonado por las generosas arcas de Casa de Gobierno, condición en la que suelen incurrir muchos de sus colegas.
El señor Giacobbe ha realizado una encuesta sobre 4.600 casos en la provincia de Buenos Aires. Fue encargada por empresas privadas –de aquí y del extranjero- interesadas en conocer una aproximación sincera a las elecciones del 28 de junio. Si bien los números son conocidos por muchos más que los solicitantes del estudio, no han sido publicados, seguramente por prudencia y temor a reacciones del gobierno.
Algunos cifras de esa investigación: en el conjunto de la provincia se imponen Francisco de Narváez- Felipe Solá, con 37 puntos, sobre la dupla Néstor Kirchner- Daniel Scioli, que recoge 31. La alianza de radicales y Coalición Cívica reúne 17 por ciento.Otros: 15 por ciento.
El nombre de Néstor Kirchner es un lastre para Daniel Scioli- Sin Kirchner, el gobernador bonaerense recuperaría 4 puntos, lo que lo colocaría la situación de empate técnico con el peronismo disidente.
Giacobbe ha registrado un alto porcentaje de irascibilidad en el voto opositor, en especial en el electorado femenino.
Las malas noticias para el oficialismo incluyen los guarismos en el segundo cordón del Gran Buenos Aires, en el que hasta ahora parecía confiar. Kirchner-Scioli pierde tanto en el segundo cordón oeste como en el segundo cordón norte.
Giacobbe no cree que exista un voto oculto o vergonzante que en definitiva se inclinaría por el oficialismo. Más bien lo contrario, considera que la tendencia que va camino de acentuarse de aquí al final de junio es la del “voto colérico” anti-K.
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