2011: Kirchner pierde en cualquier escenario político

Luis Pico Estrada

En la segunda vuelta pierden de forma inevitable.

Hay datos y datos de encuestas y encuestas. ¿Para qué sirven? Al menos para fijar orientaciones y prioridades. Los Kirchner suben la resbalosa cuesta hasta ser competitivos en una primera vuelta. Más allá de que la segunda vuelta sea inevitable y muy probablemente perdidosa para la pareja presidencial.

A pesar de que Néstor Kirchner marcha primero en las encuestas, en cualquier escenario de ballottage pierde con amplitud.

Un monitoreo de opinión pública realizado a nivel nacional por Management & Fit ofrece datos semejantes a los que maneja Olivos. El 17,8 por ciento hoy votaría a Kirchner.

“Con el 14,6 por ciento se encuentra el vicepresidente opositor Julio Cobos y a la baja. Ricardo Alfonsín queda en un tercer puesto con el 10,9 por ciento. Sigue en ascenso”.

“Al frente del grupo del peronismo federal está Francisco de Narváez (7,1 por ciento), seguido por Carlos Reutemann (6,6) y Eduardo Duhalde (6,5)”.

 “En todo caso, según Management & Fit  el Gobierno pierde. Tiene encima mal humor y desgaste. El rechazo por la Presidenta y su consorte alcanza más del 60 por ciento de los consultados”.

Santiago Rossi, de IPSOS considera que la góndola del oficialismo ya tiene sus ofertas y el consumidor las conoce. Para bien y para mal. La indefinición en las candidaturas opositores contribuye a la falta de ofertas concretas y atractivas. El radical-socialismo requiere de otra interna (Cobos-Alfonsín) y el peronismo federal de Eduardo Duhalde deberá sacar una inesperada baraja del mazo en caso que no progrese su candidatura.

¿Y en el mundo cómo andamos?

El cielo del mundo se nubla con perspectivas de temporales. Las nubes las traerán hasta aquí. Esa lluvia ácida influirá en los votantes. La góndola oficial se va quedando sin oferta. Por su parte Ricardo Delgado de Analytica, en un informe extenso, hace este descarnado augurio que aquí se sintetiza:

“Para la Argentina no hay buenas nuevas. El deterioro del contexto externo se está materializando. El riesgo latente asociado a la irresuelta crisis europea se combina con las primeras manifestaciones de un equilibrio postcrisis caracterizado por el bajo crecimiento, alto desempleo y tasas por el piso en las economías avanzadas, y con temores sobre la sintonía fina china”.

 “El optimismo respecto de la recuperación de la crisis global parece estar agotándose en tanto nuevos indicadores muestran una fragilidad inesperada en términos de actividad económica. Hay crecimientos esperados debajo del 4 por ciento. En el escenario europeo, el moderado crecimiento podría caer por debajo del 2 por ciento”.

“Así, la alegría por la flexibilización china duró poco y ya se algunas oyen voces de alerta por el eventual impacto negativo que la desaceleración,  inducida por la reversión de sus políticas macroeconómicas que desarma las expectativas inflacionarias y la burbuja inmobiliaria”.

 “El riesgo permanecerá en estos niveles al menos hasta fin de año, y ejercerá una influencia negativa sobre los activos de riesgo, incluyendo los del mundo emergente y, en particular, los argentinos”.

La Argentina requiere de acuerdos y políticas estables cuanto antes. Es el pensamiento de los máximos referentes de los grandes partidos de la oposición. No hay tiempo para jugar a la perinola de la política chica. No es tiempo de distracciones ni morder las carnadas que lanza el oficialismo. A todos – medios incluidos - les tienta la progresía.

Afuera es noche y llueve tanto. Aquí hace falta (al menos) un paraguas para seguir caminando en estos tiempos tormentosos.