Hace unos minutos estaban por dar el alta a Adriana Contreras, la trabajadora autoconvocada de la salud que hizo una huelga de hambre y posteriormente desistió para internarse en un sanatorio del centro de la ciudad. La instrumentadora quirúrgica del hospital Independencia volvería a su casa, con la prescripción médica de solamente ingerir líquidos, hasta tanto su organismo comience a tolerar los sólidos, luego de 10 días no alimentarse.
Mientras, los auto-convocados, anunciaron que el paro por tiempo indeterminado continúa firme, y llamaron para el jueves 4, a las 8 de la noche a una marcha que partirá desde la Catedral y recorrerá el centro de la ciudad.
Los organizadores de la marcha confirmaron que asistirán diversas asociaciones intermedias, la Central de Trabajadores Argentinos, organizaciones no gubernamentales, partidos políticos y numerosos santiagueños que apoyan el reclamo de una política de salud que contemple los derechos de los pacientes y los trabajadores de hospitales, salas y postas de toda la provincia.
Un sector de la Iglesia Católica , encabezado por el sacerdote Sergio Lamberti, de la pastoral social, también será de la partida, aunque ninguno de los dos obispos de Santiago, Francisco Polti Santillán y Ariel Torrado Mosconi se pronunció todavía sobre el particular. Cabe recordar que un conflicto similar atravesaron los médicos y auxiliares de la salud de Tucumán y que quien posibilitó que se levantara el paro y que comenzara el diálogo entre las partes, fue el arzobispo de la vecina provincia, Luis Héctor Villalba.
Por otra parte los auto-convocados manifestaron su preocupación porque los delegados de otros hospitales que concurren a las asambleas que se realizan en el Regional son sistemáticamente rechazados por piquetes policiales fuertemente armados, apostados en la puerta del hospital. La situación es grave, según informaron, porque se está avasallando el derecho de reunión, expresamente consagrado en la Constitución Nacional.
Foto: La Guardia de Infantería trata de instalar
el miedo entre los trabajadores de la salud.
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