jueves, 27 de mayo de 2010

Ya no hay dudas: Tarchini Saavedra no puede ser juez

Ramón Tarchini Saavedra.
Gerardo Zamora, como amigo de su ex pariente político, el juez de cuarta del Crimen, Ramón Tarchini Saavedra, tiene que tomar cartas en el asunto. Lo mismo debería hacer el ministro de Justicia, Ricardo Daives, como responsable directo de lo que pasa en el Poder Judicial; donde pasan muchas irregularidades que ya no se pueden tolerar.
Tarchini Saavedra acaba de perpetrar un hecho fantástico, sentado en su sillón de juez en comisión (o sea provisorio), donde cree que goza de todas las impunidades.
Acaba de entregarle un camión a un depositario judicial que se llama Luis Flores (a) “Rififí”, muy conocido en la policía y en la justicia por su abultado prontuario.
Pero resulta que el propietario al que le habían robado el camión, encontró a vehículo en la vía pública y se fue corriendo a la policía. Presentó la documentación pertinente que lo acredita como dueño del rodado y la denuncia de que lo habían robado. Allí, los uniformados le informaron que estaba entregado por el juez de cuarta a Luis Flores, al quien Tarchini Saavedra lo designó depositario judicial.
Como hubiera procedido cualquier afectado, el propietario del camión corrió a ver al juez de cuarta. Pero no tuvo suerte. El magistrado de Zamora y de Daives mantuvo su resolución designando a “Rififí” como depositario judicial.
¿A dónde podrá recurrir este pobre hombre ante tamaño despojo? ¿A los camaristas? ¿Al Superior Tribunal de Justicia? No, a ningún organismo de la provincia. O espera que pase el tiempo para cuando llegue la hora de las reparaciones, o denuncia en Buenos Aires. No tiene otro camino.
“Rififí” es un conocido “datero” de la policía. Por ello, muchos uniformados (y hasta jueces) lo amparan cuando comete algún ilícito. En la época que el D6 era conducido por “Chupa” Ramírez, “Rififí” manejó, por ejemplo, los camiones que la policía había asaltado en la ruta y despojado de cigarrillos a la conocida firma Nobleza y Piccardo.
Por todo ello creemos que Zamora y Daives no pueden permitir que Tarchini Saavedra siga integrando el elenco de jueces del Crimen de Santiago del Estero. Es sencillo, el juez de cuarta tiene una banda. Maneja una organización que puede decir que está integrada por amigos, pero es una banda al fin.

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