Elías Suárez, Julio De Vido y Gerardo Zamora.
El zamorismo, en su pacto con el kirchnerismo, ha convertido a la provincia de Santiago del Estero en el “kiosco preferido” del gobierno nacional, donde Néstor Kirchner y el ministro de Planificación, Julio De Vido, encaran obras faraónicas que se pagan cinco veces más de lo que cuestan.
Varios emprendimientos, que se “ostentan” en nuestro medio, son la prueba fehaciente de que la Nación envía verdaderos chorros de plata que se despilfarran y que permiten el enriquecimiento de funcionarios de allá y de aquí; más sus amigos empresarios.
El más escandaloso será, sin duda, la obra del aeropuerto en Las Termas de Río Hondo, con un sobreprecio exorbitante a favor de un empresario amigo del gobernador Gerardo Zamora, mientras el 70 por ciento de los santiagueños siguen sin contar con agua potable, y las principales carreteras (ruta 9 de Capital al límite con Tucumán y ruta 36 de La Banda a Selva) necesitan urgentemente trabajos de mejoras y ensanchamientos que habiliten un tránsito seguro.
Fuentes confiables dieron cuenta que durante el próximo ejercicio (año 2011), la administración zamorista recibirá casi 4.900 millones de pesos en concepto de coparticipación federal. Según los entendidos, se trata de algo más del 15 por ciento de lo previsto para el ejercicio 2010.
Sigue el “kiosco” y se mantiene la fiesta de la obra pública, que es el modus operandi mediante el cual, de la noche a la mañana, aprecen funcionarios y empresarios multimillonarios.
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