La movilización de los docentes.
Docentes santiagueños se movilizaron ayer a la sede del Consejo de Educación para exigir a la presidenta del organismo que responda los múltiples petitorios presentados desde hace tiempo, explicó la vocal del gremio, Marta Epstein quien explicó que “ante la negativa de las autoridades a recibir a los manifestantes, permanecimos en el organismo provocando la paralización de su actividad”.La vocal denunció “que hay una política de vaciamiento de las juntas de clasificaciones para volver al sistema de designaciones por favoritismo político” y anticipó que “el plan de lucha va a profundizarse en resguardo de la carrera docente y de los organismos del Estado”.
La sindicalista también advirtió que esta política del gobierno “permitirá volver a las prácticas de clientelismo político, propias del régimen juarista caído en el 2003” y reclamó además la incorporación al básico de todas las sumas en negro, incluido el Fondo de Incentivo docente, que superan la mitad del salario de bolsillo.
Marta Epstein detalló que el gobierno que conduce Gerardo Zamora agravó el escenario porque “nunca aportó soluciones concretas a los reclamos” y aseveró que la crítica situación del sector educativo “ha provocado una lucha gremial muy intensa que ha sido castigada y sancionada sin piedad, a través de una censura feroz”.
El reclamo
Ayer los docentes se plegaron a la jornada de Lucha Activa y Movilización impulsada por el Círculo Santiagueño de Enseñanza Media y Superior para reclamar la inmediata designación de personal en las juntas de calificaciones, particularmente la de nivel primario.
“Tanto la presidenta del Consejo como los vocales de las Juntas de calificaciones conocen el problema y saben que, con las disposiciones de la ley 6976 y el virtual desmantelamiento de las juntas de calificaciones se ha colocado al borde del abismo al sistema educativo para el ciclo 2011” , coincidieron docentes participantes de la marcha.
Varios maestros del interior se acercaron a los manifestantes para expresar su adhesión y denunciar la situación dramática de aquellos que se jubilan con haberes “miserables” en razón de la política salarial con un 60 por ciento en negro.
No faltaron las expresiones en demanda de la incorporación al básico de todas las sumas en negro y el repudio generalizado por los recortes de servicios de la obra social Iosep.
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