Cristina y Aníbal vinieron por "Chabay", pero la prensa alaba a Zamora

Aníbal Fernández lanzó la campaña de Ruiz en La Banda.

El intendente de La Banda, contador Héctor Eduardo “Chabay” Ruiz es otro de los “castigados” en la prensa oficialista porque así lo dispuso el gobernador Gerardo Zamora y su séquito de operadores (llámense “Sugus” Suárez o Ricardo Daives). Una prensa que con tal de que “Zamorita” le pague y le incremente las pautas  o los negocios, publica cualquier cosa.

Hace poco la presidente Cristina Fernández le depositó los mejores elogios y hasta hizo el guiño de que será -si sigue gobernando el kirchnerismo- el candidato a gobernador. Por supuesto, la serie de boletines oficiales no hizo mención al hecho político más significativo de aquella visita presidencial.

Ahora acaba de pasar por La Banda, en dos jornadas, el jefe de Gabinete de la Nación. En efecto, la mano derecha de los Kirchner, el contador y abogado Aníbal Domingo Fernández, acompañó a “Chabay” y le dio el espaldarazo para su reelección como intendente. De paso, agradeció y reconoció la lealtad y la eficacia de la senadora Ana Corradi, del riñón chabaísta.

Como ocurre siempre, los boletines oficiales tampoco hicieron la lectura política adecuada. Es como que no entendieron, otra vez, el mensaje, el gesto y el guiño del kirchnerismo: el próximo candidato a gobernador será “Chabay”. No se anima, esa prensa mezquina y comprada,

A desmenuzar, reflexionar y contar a la ciudadanía (o a sus lectores, oyentes o televidentes) el verdadero contexto de lo que se viene en la vida política nacional y constitucional, siempre que continúe la hegemonía de los Kirchner.

Parece que los poderosos dueños de medios de Santiago le temen mucho a los Zamora, a los “Sugus” y a los Daives y por ello no le explican a su público que Néstor y Cristina y tomaron la decisión política: si se mantienen en el poder, el zamorismo se va a la casa y llega “Chabay” a la Casa de Gobierno.

De este modo, esta prensa pagada y prebendaría, empleada del zamorismo, sigue haciendo el ridículo y se torna inservible para los planes y objetivos del régimen que gobierna Santiago, sencillamente porque los canales nacionales reflejaron al instante lo que pasó con la visita de la Presidenta y ahora con la llegada de Aníbal.