Pregunta Fares Ruiz: ¿Cuánto cuesta entubar el Chujchala?

Estado actual de una obra de costo impreciso.

¿Cuánto dinero cuesta hacer el canal aliviadero del arroyo Chujchala en Las Termas? es la pregunta que viene haciendo el diputado José Walter Fares Ruiz desde el 9 de setiembre del año pasado, cuando presentó un proyecto de comunicación en la Legislatura

Las noticias que se vienen publicando son confusas, por no decir que generan sospechas. Por una parte se dice que la licitación la ganó la empresa Lobar, con un monto de 3.900.000 pesos financiados por el Gobierno de la Provincia. Pero otras informaciones sostienen que se necesitan algo más de 30.000.000 de pesos para lograr el saneamiento de la cuenca con un entubamiento del arroyo. Pero luego los diarios informaron que la red colectora y la planta de tratamiento de líquidos cloacales en Las Termas de Río Hondo, tendrá una inversión de 105.781.861 pesos.

¡Epa, epa! En una provincia que no es gobernada precisamente, por hermanitas de la Caridad en cuando a los manejos de fondos, esta disparidad de números causa asombro, para no decir que muchos sospechan  que sucede algo raro. Por eso el diputado Fares Ruiz pidió este informe, teniendo en cuenta que todas las noticias reconocen como fuente de información el gobierno de la provincia.

Esta es la razón que lo hace decir al diputado en su presentación, que “resulta imprescindible que la información destinada a la ciudadanía sea veraz y que la asepsia de intereses políticos y económicos permita evaluar la gestión transparente que se pregona”. Porque “las cifras que se mencionan en las informaciones en cuestión son por demás desiguales creado un legítimo sentimiento de duda sobre el costo total de la obra referida”.

¿Los lectores desean saber qué sucedió finalmente con el pedido de informes del legislador termense? Duerme el sueño de los justos, obviamente, en algún cajón perdido de la Cámara de Diputados.

Este es un gobierno cuyas autoridades se ofenden cada vez que alguien les pide que rindan cuentas, algo sencillo y elemental en cualquier régimen republicano. En ese sentido, la curiosidad de Fares es un exotismo en el mejor de los casos, una falta de respeto en el peor.