Guillermo Cherashny
El gobernador radical K de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, se ha convertido en el nuevo mandamás de la provincia, superando el liderazgo populista del hoy preso Carlos Juárez, que gobernó la provincia durante 50 años con mano de hierro pero con un gran austeridad fiscal. Todo hasta que el kirchnerato aprovechó el asesinato de dos chicas santiagueñas que tuvieron una fiesta de sexo y drogas con hijos del poder y, a partir del gigantesco escándalo mediático que se generó, defenestrar a los Juárez y nombrar interventor federal al ex Fiscal Pablo Lanusse. Éste destruyó el peronismo santiagueño y lo dejó en manos de un dirigente de tercer orden, Marcelo Nazar, consejero del PJ nacional. Nazar se las arregló para piratearle el canal Argentinísima al ex senador José Figueroa, contando para ello con el apoyo kirchnerista, y ahora mendiga una pauta de publicidad nacional que nunca llega y es cómplice del zamorismo. Argentinísima en el único canal federal y peronista, por el cual se pasa el noticiero chavista de Telesur. Es cierto que tanto el Comfer como el gobierno nacional lo tratan muy mal, pero Nazar ha demostrado ser un masoquista de la política y se deja manosear a cambio de nada.
Ahora el zamorismo y el nazarismo están en aprietos a causa de la aparición de un paciente muerto en el hospital Ramón Carrillo de la capital santiagueña, que marcó el desborde de la crítica situación del sistema de salud local. El hecho produjo una huelga por tiempo indeterminado de médicos y trabajadores de la salud, que motivó que canal 13 se instalara ahí como lo hizo cuando el principio del fin de los Saadi en Catamarca y de los Juárez en la misma Santiago del Estero. Ahora sobran elementos como para suponer que los días del zamorismo pueden estar contados.
Extraído del Informador Público.
Foto: Gerardo Zamora.
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