jueves, 3 de junio de 2010

Perlas cultivadas

Lo que vale es… ¿qué era?
Hay veces que los funcionarios santiagueños hacen declaraciones según lo que les está pasando ese  día y no tienen miedo de desmentirse luego.
Ayer los santiagueños nos enteramos de que el gobernador Gerardo Zamora cree en las ideas, no en los hombres, porque los proyectos trascienden el tiempo y en cambio los hombres son circunstanciales. Lo dijo cuando le preguntaron quién será su candidato en la capital. Pero resulta que hace dos semanas, cuando al fin la justicia lo notificó de la intervención a la Unión Cívica Radical, creía en los hombres y no en los partidos políticos, entidades huecas y vacías de contenido. ¿Quién lo entiende? ¿Al final qué es lo que vale?, ¿las instituciones o los hombres que las gestionan?

Angel, vecino del juez de cuarta
Si algún día un novelista policial llegara a darse una vuelta por Santiago, se caería de espaldas por las barbaridades que se cometen todos los días en la Justicia.
El juez de cuarta, Ramón Tarchini Saavedra, primo de la primera señora del gobernador, hizo depositario de 14 vehículos, entre autos, camiones y camionetas a su vecino, Miguel Ángel Quiroga. ¿Le suena? Acertó, el mismo del desarmadero “Los Angelitos”, en la avenida Madre de Ciudades, a pasos del barrio Borges. Es dueño de un abultado prontuario y en su desarmadero se hicieron en el pasado varios allanamientos que dieron resultado positivo. Los vehículos están en su mayor parte, alquilados al gobierno de la provincia. ¿Más datos? Es socio de Daniel Elall, el policía “licenciado” por sus jefes del que dimos cuenta ayer.

Bici-garraferos
Hablando de la policía, hay hechos ciertos y comprobados de los que alguna vez alguien tendrá que hacerse cargo o al menos dar una respuesta a la sociedad.
Desde el primer mandato del gobernador Zamora hasta ahora, la policía no ha descubierto ningún robo de más de 10.000 pesos. Todos los días aparecen fotos de pobres diablos que hurtaron una garrafa o una bicicleta. La policía es muy efectiva a la hora de investigar pequeños hurtos de gente que lo hace quizás por necesidad extrema. Pero de los que necesitan de una inteligencia previa, armas y otros elementos y dos o más pillos dispuestos a apropiarse de lo ajeno nunca se sabe que haya resuelto ni uno solo. Con razón algunos dicen que la policía actual se convirtió en bici-garrafera o policía sólo para pobres.

No hay comentarios: