Cerró sus puertas la fábrica de tomates.
No es noticia para nadie, al parecer. La planta de enlatado de tomates de la ciudad de Fernández ha desmantelado sus maquinarias y se marchó para Mendoza, seguramente buscando mejores horizontes.
Se trata de una gran pérdida para los fernandenses y para toda la economía santiagueña, y demuestra que no todo anda bien, como se dice, en materia de Producción.
Se esperan algunas explicaciones del gobernador Gerardo Zamora y de su ministro de la Producción. Luis Gelid, sobre todo porque ambos ponen el grito en el cielo, traen a la Presidenta de la Nación y hacen un circo que impresiona, cada vez que se inauguran algunas “plantitas” como la de las galletitas, que apenas ocupa a tres empleadas.
Los ciudadanos tienen que informarse, a través de sus funcionarios del área, por qué se ha ido esta empresa que daba trabajo a muchos santiagueños y que, en otro tiempo, fue un verdadero motor para los productores de la zona del departamento Robles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario